Familia Laical
La Familia Laical Ángel de la Guarda (FLAG) Es una entidad sin ánimo de lucro que vive la vocación cristiana laical según el Carisma y la espiritualidad de la Congregación de Hermanas del Ángel de la Guarda, dentro de la Iglesia, comunión de carismas, en la que laicos/laicas y hermanas, comparten la fe y fortalecen su identidad, mantienen una especial relación de fraternidad con las hermanas del Ángel de la Guarda.
Se comprometen a SER Y FORMAR VERDADEROS DISCÍPULOS DE CRISTO, trabajando en la misión de proclamar la Buena Nueva del Reino de Dios, a través de la educación, la actividad misionera el cuidado y atención a enfermos y desvalidos; preferiblemente, en los sectores más necesitados y vulnerables de la sociedad.





CARACTERÍSTICAS DE UN LAICO
CREYENTE: Como bautizado, tiene un compromiso fundamental, cual es el seguimiento a Cristo. Cree en Dios, en los valores del evangelio, en el carisma y la espiritualidad de la Congregación de las Hermanas del Ángel de la Guarda.
AUTÉNTICO: Dentro de la iglesia será testimonio desde la fe. Vive el evangelio, el carisma y espiritualidad de la Congregación de las Hermanas del Ángel de la Guarda, desde su propio testimonio, su experiencia como laico(a) comprometido con el anuncio del reino.
SERVICIAL: Cada uno ha recibido un Don propio, y lo ofrece al servicio de los demás, desde su trabajo desinteresado por los más pobres y vulnerables, confiando siempre en la Divina Providencia.
SENCILLO: En su estilo de vida. Sabe hacerse “pequeño con los pequeños”. Transparente, veraz, cercano, rompe barreras, y hace realidad los postulados de los fundadores, como parte de la misión que están llamados a cumplir como laicos(as).
SOLIDARIO: Trabaja con los más pobres, con los pequeños, es inclusivo e incluyente, especialmente en aquellos lugares donde hay vacíos de amor, justicia y paz.
RESPONSABLE: Hace de su laicado compromiso esencial como bautizado, que pertenece a una Iglesia que convoca a trabajar desde la fe, la confianza en la Providencia, el servicio y la sencillez en la construcción del Reino de Dios, tarea nunca concluida.
HUMILDE: Aprovecha cada momento para hacer de una debilidad o amenaza, una fortaleza y oportunidad de servir y transformar aquello que el entorno le ofrece.
LÍDER: Tiene capacidad de impulsar, animar, acompañar proyectos y de trabajar en equipo, con sentido constructivo para transformar la realidad.